miércoles, 21 de marzo de 2012

Maravillas en nuestro entorno (para no contárselas a nadie)

Las horas libres que me tomé el viernes me sentaron de maravilla. Bendita la hora que mi adicción al deporte me empujó a caminar rápido sobre arena blanda. La hora y media de entrenamiento resultó más placentera de lo previsto, en ese paraíso contiguo que es Praia de Faro. Es-pec-ta-cu-lar tesoro ambiental y social. Queridos amigos portugueses, enhorabuena. Bendito puente y maldito peaje.